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Florencio Morales Ramos

Ramito, “el Cantor de la Montaña”
Por David Morales

Foto promocional de Ramito durante la década de 1950

El Legado de Ramito…

Música típica…música de monte adentro…música campesina…música jíbara; no importa cómo la llamemos, la música nacional de Borínquen no sería la misma hoy -- ni mañana – sin Ramito; nuestro más importante exponente de la música campesina.

Por más de 50 años, Ramito llevó y elevó la música jíbara Puertorriqueña alrededor del mundo; desde Puerto Rico a EEUU y hasta Japón. Este talentoso trovador de décimas, aguinaldos y cuartetas contenía todos los requisitos necesarios para ser un trovador completo: buena voz, buen escritor y buen improvisador.

Gracias a Ramito, cientos de trovadores cultivaron y aún preservan la música tradicional de Puerto Rico. Además, gracias a su amor por nuestra música, Ramito rescató temas y ritmos tradicionales y obscuros del cancionero Puertorriqueño como aguinaldos de cuna, aguinaldos religiosos y las varias formas del aguinaldo cagueño. Sin embargo, aunque plasmó más de mil grabaciones y creó un sinnúmero de seises y aguinaldos, poco se conoce sobre la trayectoria musical de éste baluarte Borincano.

Este breve ensayo representa un esfuerzo humilde por agregar la trayectoria musical de Ramito y para proveerle al lector una pequeña reseña del inmenso legado de Flor Morales Ramos, mejor conocido como Ramito, “el Cantor de la Montaña".

Los títulos de grabaciones nombrados que se destacan en relieve en color azul son los que se pueden oír al pulsarlos.

 

Sus Inicios

Nace el día 5 de septiembre de 1915 en el barrio Bairoa de Caguas, Puerto Rico. En sus propias palabras Ramito relata,

Yo nací en el Barrio Bairoa Arriba el 5 de septiembre de 1915, allí donde los cabros no pueden comer si no es con la emergencia puesta, porque se van por el risco.1

Ramito tenía doce hermanos. De los trece hermanos Morales, seis eran hermanos naturales y siete hermanos de crianza. Los hermanos naturales (según edad) eran Casito, Bruno, Florencio (Ramito), Lázaro, Juan María (Moralito, "el Jíbaro de Monte Adentro") y Luis (Luisito, "el Montañero de Bairoa"). Su padre se llamaba Juan Morales Díaz y su mamá Leonarda Ramos Lozada. Según Luis Morales Ramos, su mamá le sirvió de mayor influencia e inspiración a Ramito, no solamente en la trova sino en la vida. Leonarda les inculcaba a los hermanitos la importancia de respetar las normas sociales y la importancia de ser responsable y laborioso.

En cuanto a la música, Doña Leonarda “llevaba la vena musical por dentro” y cantaba e improvisaba décimas mientras realizaba sus quehaceres hogareños y labores de la finca. Una mujer sencilla, su padre (Don Zoilo Ramos) era ministro de una iglesia pequeña en Bairoa, donde le exigía a su familia que participaran en los servicios de la iglesia. Esta influencia paternal impactó a Leonarda de manera que siempre cantaba rosarios y aguinaldos religiosos en su casa. Por otro lado, el abuelo paternal de Ramito -- Lorenzo Morales – quien entonaba décimas y cadenas mientras trabajaba; fue conocido en aquella época como buen cantor de pueblo.

Desde niño Ramito fue rodeado por la música campesina no solamente gracias a sus padres, sino también porqué en Caguas había una gran concentración de trovadores. Desde tiempos antaños, Caguas se conoce como la cuna de los trovadores. Varios escritos señalan también que Caguas se conoce como el pueblo principal de la trova. El profesor Orlando Santiago-Díaz nos relata:

Caguas, hacia mediados del siglo, [diecinueve] sobresalía por la presencia de trovadores, orquestas jíbaras y notables tocadores de tiple, cuatro y bordonúa con los que acompañaban los cantos de coplas, aguinaldos y décimas. Según Fernando Callejo, Caguas era el pueblo donde el canto regional estaba mejor integrado. 2

Sabemos que para aquel entonces Caguas contaba con maestros trovadores y escritores de décimas como Perfecto Alvarez, quien para 1919 publica el libro de décimas Trovas Rurales donde destaca temas patrióticos y de amor. También, vivían en la región trovadores y decimístas como Angel Pacheco Alvarado el Jíbaro de Peñuelas (uno de los más influyentes trovadores y escritores de la época), Plácido Figueroa de Caguas, Francisco ”Paco” Roque de Naranjito, Iluminado Félix (el Jíbaro de Ceiba), Juan Serrano (conocido como Leña Verde) de Comerío y Jesús Díaz “el Conde” de Guayama; quienes servirían como fuente de inspiración y como autores anónimos de décimas cantadas y grabadas por Ramito.

En cuanto a sus inicios en la décima, Ramito relata que aprendió sus primeras décimas a los seis años con su hermana Isabel y que a los ocho años improvisaba décimas, cantaba cuartetas bíblicas y rosarios cantados en las “promesas” que se celebraban en el barrio.3 Ramito también relata en varias entrevistas que cuando joven trabajaba como “pinche” y le cantaba décimas y cadenas a los trabajadores cuando realizaba sus responsabilidades. En una entrevista realizada por Pedro Malavet Vega en 1981, Ramito cuenta que:

A los 10 años llegué a Puerta de Tierra, a la casa de un viejo amigo de mi papá que trabajaba en los muelles, y me quedé con él. Le servía de muchacho de mandao’, como se dice. Le llevaba el almuerzo y le ayudaba en algunas cosas. Ese señor le pidió a un amigo suyo que me enseñara a ser zapatero. Mientras tanto se adentraba en mi lo de cantar. Y cuando se empezó a construir la carretera del río Blanco, entre Naguabo y Juncos, empecé a trabajar como listero, llevándole agua a los trabajadores, algo que en el campo se le llama pinche. A los muchachos les gustaba que yo cantara. Y me decían: Caguita, improvisa algo. Yo improvisaba sobre los temas que ellos me pedían y cuando surgió la oportunidad, me metí de lleno en el canto”. 4

Su primera oportunidad en la música ocurre cuando apenas tenía diez años de edad. Según nos relata Ramito en una entrevista:

Me fueron a buscar Roque Muñiz y el licenciado Reguero para cantar por primera vez en la Plaza de Caguas. Su papá se mostró receloso a la invitación que se le hacía y contestó: "Mi hijo no va, porque cantando gana el cura y él no puede ir." Ante la insistencia del señor Reguero, don Juan Morales permitió que Ramito asistiera al evento no sin antes advertir " Bueno, si es usted lléveselo, pero usted me lo trae." El muchacho recibió un chequesito por aquella actividad musical y su papá cambió de parecer y se le escuchó decir: "Bueno, si es así, pué seguir, pué seguir. 5

Además de llevar la vena musical en la familia, Ramito también aprovechaba de los concursos de trovadores que se realizaban frecuentemente justo al frente de su casa en Caguas. Luis Morales nos cuenta que cuando la familia vivía en el barrio las Marías de Caguas, la casa quedaba frente a la plaza. Desde su casa se podía ver y escuchar a los trovadores cantando en un programa radial de aficionados de Don Roque “Yoyo” Muñiz. Según Luis Morales, trovadores como Vicente Vázquez (El Ruiseñor del Turabo), entre otros, amenizaban el programa radial. Para aquel entonces, Ramito trabajaba como alcaide en la cárcel municipal de Caguas al lado de la alcaldía de Caguas.

El Origen de su Nombre Artístico: Ramito

En 1932 Florencio Morales Ramos contaba con 17 años. Ya se podía escuchar la música campesina por las ondas radiales de la emisora WKAQ de San Juan. Ese mismo año el maestro del cuatro Don Ladislao Martínez (Ladí) graba sus primeras grabaciones con el Grupo Aurora. Entre estas grabaciones se encuentra el tema El Seis del Dorao’ donde Claudio Ferrer y Juan Cotto cantan unas décimas picantes al son del cuatro innovador del Maestro Ladí.


Ramito con Claudio Ferrer

Mientras tanto, Ramito se lanza al mundo de la trova al ganar un concurso de trovadores en Caguas auspiciado por Perú Maymi, dueño de una mueblería local. 6 Luego de ganar este prestigioso consurso, Florencio se presenta en el programa radial de Don Rafael Quiñones Vidal, Tribuna del Arte. Don Rafael Quiñones Vidal promovía artistas puertorriqueños en su programa, donde tenía un proceso riguroso de “graduar” con “pesetitas voladoras” a los aficionados que se presentaban en su programa. También, Don Quiñones Vidal le ponía apodos a estos aficionados, los cuales permanecían con ellos durante sus carreras artísticas. Para esa época era sumamente importante graduarse del programa Tribuna del Arte, porqué significaba contratos lucrativos y beneficios económicos para la mayoría de los aficionados.

No sabemos la fecha exacta en que Ramito visita el programa de Don Rafael Quiñones Vidal. Luis Morales opina sin seguridad fija que secede en 1936. No obstante, Don Quiñones Vidal quedó muy impresionado con la voz poderosa del principiante trovador y lo gradúa del programa de inmediato. Luis Morales relata que Don Quiñones Vidal le preguntó a Ramito si tenía algún nombre artístico o si quería que se lo pusiera él. El joven Florencio le contestó que le pusiera un nombre que honrara a su mamá Leonarda para prestigiarla. Don Quiñones Vidal lo nombra Ramito siguiendo el hilo de su apellido maternal, Ramos. Es así que surge el nombre “Ramito, el Cantor de la Montaña.”


Rafael Quiñones Vidal  (1892-1988) , creador de la Tribuna del Arte
y nombrador de Ramito  

 

Sus Primeras Grabaciones…

Luego de graduarse del programa Tribuna del Arte, Ramito consigue contratos importantes que lo llevan a diferentes tarimas de Puerto Rico. Uno de estos contratos lo consigue con los señores Juan Brugal y Pepe Balado, dueños del Ron Brugal, Ron Tráfico y Ron Caballito en Puerto Rico.

Este contrato resulta importante en el desarrollo de Ramito, ya que le permite hacer presentaciones por todo Puerto Rico, y lo une a otra leyenda de la música típica: Jesús Ríos Robles, mejor conocido como Chuito el de Cayey (tal vez el mejor trovador e improvisador de su época, y creador del Seis con Décimas). 7 Algunos trovadores relatan que Ramito aprendió mucho sobre el canto jíbaro y la interpretación de la décima junto a Chuito el de Cayey.

En 1939, Ramito graba por primera vez con el conjunto Industrias Nativas del Maestro Ladí, con quien dos años antes Chuito el de Bayamón (Jesús Sánchez Erazo) y Natalia Rivera habían plasmado ocho grabaciones de música campesina (cuatro aguinaldos y cuatro seises). 8 Esta sesión histórica produjo cuatro discos considerados joyas escasas por coleccionistas de música del ayer. Ramito explica:

Yo no recuerdo la fecha exacta, pero fue para la RCA Victor, aquí en Puerto Rico, para 1939, cuando no había entonces cintas magnetofónicas. Se grababa y se tocaba en vitrolas con manivela. En ese disco el compadre Ladí graba la mazurka Natalia; yo canté “Estrellas de Oriente,” un aguinaldo, y unas décimas de amor. 9

Acompañado por el conjunto Industrias Nativas del Maestro Ladí, Ramito graba cuatro grabaciones por las cuales le pagan diez dólares: “Estrellas de Oriente” (Aguinaldo Cagueño); “Súplica Postrera” (Aguinaldo Cagueño); “Convenio de Amor” (Seis con Décimas); y “Los Pueblos de Borínquen” (Seis Chorreao):

Voy a empezar por San Juan,
Ponce, Mayague’ Arecibo
Cayey, Caguas donde vivo,
Utuado, San Sebastián.
Cabo Rojo, San Germán,
Aguas Buenas con honor,
Juana Díaz con amor,
De Llorens nuestro poeta
Jayuya y Barceloneta
Vaya contando lector.

Rincón, Rio Grande, Aguadilla
Camuy, Ceiba, Comerío
Aibonito con el frío.
Vieques, Cataño, Patilla
Hormiguero, Guayanilla
Ciudad Ciales con primor,
Corozal que es menor
Loíza y Carolina
Culebra, Coamo y Salina’
Vaya contando lector

Añasco, Arroyo y Hatillo
Aguada, Adjuntas, Humacao
Juncos, Lajas, Maricao
Manatí, Moca y Luquillo
Dorado, Lares, Trujillo
Y Barranquitas señor.
En Fajardo donde el sol
Calienta con la candela
De Guayama e Isabela
Cuénteme estricto lector

Yauco, Yabucoa y Gurabo
Sabana Grande, Orocovis
San Lorenzo y Morovis
Y Toa Baja con Maunabo
Y Las Piedras con Naguabo
Bayamón del trovador
Villalba, pueblo menor
Rio Piedras, Santa Isabel
Naranjito para ver
Vaya contando lector

Toa Alta ciudad sencilla.
El trovador no se raja
Vega Alta y Vega Baja
Peñuelas y Quebradillas
Guaynabo, la maravilla
Guánica tu eres la ley
Preguntaré en mi batey
Cual me falta en la poesía
El pueblo de Juana Díaz
Completan setentaiseis

De Caguas a Guaynabo

Según Luis Morales, los padres de Ramito se mudan al barrio Camarones de Guaynabo en 1941, un sector fértil de trovadores “de campo” como los define Luis Morales. En Guaynabo los hermanos Morales unen sus voces y comparten bastante en las fiestas campestres y programas radiales con tres trovadores de Guaynabo: Juan Inés Aponte mejor conocido como “Juaniquillo, el Zorzal de Orocovis;” Vitín Cruz, “el Canario de Guaynabo” (cuñado de Juaniquillo); y Angel Alfonso Cruz conocido como “Alfonsillo.” El más destacado de estos tres trovadores era Juaniquillo quien tenía un programa radial en San Juan titulado La Hora Radial Criolla donde se presentaba Ramito. Junto a estos trovadores Ramito amenizaba promesas, rosarios cantados y fiestas de campo que en aquel entonces se llevaban a cabo casi todos los fines de semana.

Desafortunadamente, no existen muchos archivos históricos de estos legendarios trovadores de Guaynabo, especialmente de las grabaciones o presentaciones radiales de la época. Por cierto, para entonces no habían muchas oportunidades para grabar en Puerto Rico en general. La industria disquera todavía estaba en su infancia en Borínquen. La oportunidad de grabar era aún más limitada para los trovadores.

Sin embargo, en las emisoras radiales del país los trovadores tenían oportunidades de presentar sus décimas y sus voces, gracias a los varios programas radiales de música campesina y a las compañías que solían promover sus productos. Estas compañías contrataban con trovadores para que ellos auspiciaran sus productos por la radio al son de sus décimas o “jingles” comerciales. Lamentablemente, pocas de estas presentaciones radiales sobreviven hoy día.

En cuanto a los trovadores que ya habían plasmado sus voces a disco le damos las gracias a los coleccionistas que han preservado estas joyas disqueras y que hoy nos señalan hacia aquellos trovadores que tuvieron la suerte de grabar en aquel entonces. Entre los trovadores que habían grabado sobresalen Chuito el de Bayamón, Chuito el de Cayey, Natalia Rivera, Ramito, Juaniquillo, Victor Lluveras Ríos, y José Vilar.

1942-1949: Epoca Poco Conocida

Es difícil reconstruir el periódo entre 1942 hasta 1949; un tiempo importante en el desarrollo de la música típica de Puerto Rico. Durante este tiempo varios elementos sociales e históricos se funden para lanzar la época dorada de la música campestre que surge en 1950.

Durante esta época aumentan las cifras de Boricuas viajando a Estados Unidos, especialmente a Nueva York en busca de mejor ambiente económico. La farándula en Nueva York y los escenarios de atracción musical aumentan en las comunidades Puertorriqueñas de la ciudad Nuyorquina. Con el crecimiento de esta comunidad hispana florecen las compañías disqueras hispanas y también las grabaciones de música típica. Entre las compañías disqueras más reconocidas se encuentran la Ansonia, Verne, Coda, Seeco, SMC y la Colonial. En estas casa disqueras hallamos joyas de nuestro cancionero boricua.

En 1942 Ramito inaugura la emisora WIAC de Enrique Abarca Sanfeliz en Caguas. Algunos coleccionistas opinan que durante los inicios de 1942 Ramito graba la décima La Esposa Muerta. Aunque no estamos seguros de tal hecho, sí sabemos gracias a Luis Morales que el conjunto de los Hermanos López de Caguas acompañan a Ramito en estas presentaciones radiales de la época. Los mismos acompañan a Ramito en la versión original de La Esposa Muerta lanzada al mercado en el sello Ansonia en 1949. Los integrantes del grupo eran Marcelino López en el cuatro; José (conocido como Sé) López en guitarra y Chente López en la segunda guitarra.

En 1946 Ramito se convierte en artista exclusivo del programa La Hora del Volante en la emisora WENA de Bayamón. Durante este tiempo conoce al gran cuatrista Maso Rivera. También para 1946 Ramito inaugura la emisora radial WKJB de Tito Bechara en Mayaguez. Luis Morales nos informa que Ramito vivió un tiempo en Mayaguez y se convirtió en artista exclusivo de uno de los programas de música típica más importante de todos los tiempos, Fiesta en el Batey.

Entre 1947 y 1948 Ramito graba una sesión de ocho temas10 donde se registran cuatro plenas, dos mapeyés, una guaracha y una canción jibara. Es interesante notar que en esta sesión Ramito no solamente graba sus primeros mapeyés (Quinto Mato el de La Vega y Cansado de Vivir), sino también sus primeras plenas junto al grupo de Canario (Manuel Jiménez):

Goza La Plena:
Eso es lo que a ti te gusta,
Eso es lo que a ti te da.
Esta plena ques toda pimienta,
Pura flama en la espina dorsal

Dos Leyendas de la Música Jíbara

En 1947 Ramito conoce al cuatristas, Nieves Quintero, quien nos relata cómo sucedió el encuentro:

Precisamente en la lechonera “El Dique” del barrio Juan Domingo de Guaynabo, a las dos de la mañana, Ramito procuraba por un cuatrista para que lo acompañara en La Hora del Volante, en Fiesta en el Batey y otros shows. A Ramito le contaron los que estaban allí que yo ejecutaba bien el cuatro… yo era un muchachito y Ramito era una estrella. Ramito me pidió que yo tocara un aguinaldo en do mayor para probar mi destreza. Al escucharme tocar, Ramito me dijo que me preparara porqué me iba a buscar a la casa temprano en la mañana para que lo acompañara a Caguas para tocar en el programa radial “Rincon Criollo.” El día siguiente, Ramito le pidió permiso a mis padres para que formara parte de su conjunto.

Según Nieves, los integrantes del conjunto de Ramito eran: Cheo Rivera (guitarra), William Morales (trompeta), Nicasio Martínez (guiro) y William Maldonado (bongó). Su agenda diaria era agresiva y casi no dormía ya que de lunes a viernes, él y Ramito conducían desde Bayamón a Mayaguez para cumplir sus deberes musicales. Nieves, quien contaba con solo diecisiete años, acompañaría a Ramito por dos años junto a esta agrupación y se quedaría en Guaynabo junto a los padres de Ramito.

En 1949 consigue un contrato con la casa disquera Ansonia Records con quien ha de grabar durante toda su carrera. El mismo año, Ramito viaja a Nueva York por vez primera y cambia por siempre la trayectoria de la música jíbara. La visita de Ramito a Nueva York marca el comienzo de una época de cambio social tanto en Nueva York como en Puerto Rico y lanza lo que se conoce como hoy dia la época dorada de la música campesina.

El profesor Ewin Martínez nos relata acerca de Ansonia:

La casa disquera Ansonia comenzó como la compañía Ideal Record Sales en la 1485 Madison Avenue a fines de 1940, una asociación entre Ralph Pérez y Steven Rodríguez. Ideal, cuyo nombre fue inspirado por un teatro en Yauco, Puerto Rico donde nació Ralph Pérez, lanzó un sinnúmero de grabaciones en discos sencillos de 78 revoluciones. Artistas del catálogo Ideal incluyen el Conjunto de Pepo Talavera, Orquesta Tropical, Conjunto Ideal, Orquesta Havana Riverside, Orquesta de Alberto Rosario, Juan Peña y su Conjunto, Trio René Marquez, Cuarteto Becker, Cuarteto Goicuría, y muchos más. En 1949, Pérez se convierte en el propietario de Ideal y cambia el nombre de la compañía a Ansonia Records, inspirado por un hotel en Manhattan. 11


Primera grabación en los EEUU para el sello Ansonia (ALP1237).
La primera grabación de Ramito fue para el sello RCA Victor,
cantando con el Conjunto Típico Ladi en 1939-1940.

 

Las primeras grabaciones de Ramito para Ansonia (la serie Ansonia 5000) son cuatro temas que graba junto al cuatrista Juan Peña; su primer seis mariandá (Huérfano en el Mundo), un aguinaldo orocoveño (El Nacimiento del Mesías) y dos plenas. Pero la más famosa e importante grabación de esta época temprana sería La Esposa Muerta, un seis mariandá que según el profesor Ewin Martínez, vendió mas de 10,000 copias.

La Esposa Muerta

Perdí mi santa mujer
Me acobardan los vaivene’
Nadie sabe el bien que tiene
Hasta no verse sin el
Pero ya que voy a hacer
Me consuelo con llorar
Cuando me voy a acostar
Que veo mi cama vacía
Digo compañera mia
Cuando te volveré a hallar

Recuerdo que ella me dijo
Una tarde sin tardar
Yo te ‘e mandado a buscar
Para entregarte mis hijos
Lo único que te exigo
No los vayas a maltratar
Cuando la volví a mirar
Vi que estaba en agonía
Yo perdí la esposa mia
Cuando la volveré a hallar

La noche tendió su manto
En brazos cogí a la nena
Que me decía con pena
Papito no llores tanto
Recordando el campo santo
Donde la iba a enterrar
Vino la aurora boreal
Y con ella vino el día
Y yo llorando decía
Cuando la volveré a hallar

Vino un día mi calvario
El silencio fue mi abrigo
Cuando invité a mis amigos
Para ir al novenario
Cuando en el primer rosario
Me conformé con llorar
Cuando yo veía pasar
El café de la cocina
Grité mi esposa querida
Cuando te volveré a hallar

La Epoca Dorada de La Música Típica

En 1949 Ramito viaja por primera vez a Nueva York donde se presenta en el Teatro New York con Los Tres P: Pascual Melendez al cuatro, Paquito Cartagena en el guiro y Apolo Ocasio en la guitarra. Ramito llega a Nueva York bajo el auspicio de Don Victor Alonso, dueño de la “Revista Teatral”. Don Alonso le hacía la promociones a los artistas Puertorriqueños en NY y se unía a Ralph Pérez de Ansonia para realizar estos tipos de eventos. Para esta gira Ramito llevaba un repertorio lleno de éxitos como La Esposa Muerta, Los Pueblos de Borínquen, No Cambio a Puerto Rico, Quinto Mato el de la Vega, y la plena “La Maleta”:

Si vas para Nueva York
Debes tener cuidadito
Que no pierdas la maleta
Como la perdió Ramito

La llegada de Ramito a Nueva York se lleva a cabo durante los inicios de la época dorada de la música campesina boricua. Como nos comenta el autor Richard Blondet, paraleló a la experiencia de los boricuas que se despedían de su patria para ir a Nueva York…

     La música campesina comenzó a florecer con ímpetu en el mercado neoyorquino, convirtiéndose en el mejor antídoto para mantener vivas las raíces nacionales de los emigrantes, al tiempo que reafirmaban su identidad colectiva.
      En los medios de comunicación social –radio y televisión–, así como en las salas de teatro, se comenzó a difundir con fuerza el trabajo artístico de distinguidos trovadores del país que hallaban en la diáspora un espacio exquisito para exponer sus talentos. De esa manera, Nueva York se convirtió en uno de los mercados más preciados para la difusión de la música campesina, con un público hambriento de escuchar cantar a esas voces rítmicas que con sus frases y sus líricas evocaban el recuerdo de su terruño.
     La industria del disco también floreció como difusora del trabajo de nuestros trovadores, muchos de ellos que, curiosamente, se dieron a conocer más entre los barrios boricuas de Nueva York que en su propia tierra. Una de las figuras más significativas de esa época fue Florencio Morales Ramos, recordado como "Ramito". 12

En 1950 durante su participación en el programa Fiesta en el Batey en Mayaguez, Ramito conoce al cuatrista Tuto Feliciano, quien se convierte al largo plazo en el cuatrista preferido de Ramito. Tuto nos relató antes de su muerte, que cuando conoció a Ramito todavía tocaba el cuatro antiguo. 13 Ramito le aconseja que debiera aprender a tocar el cuatro de diez cuerdas, ya que el de cuatro cuerdas no se usaba y que él mismo prefería el sonido del cuatro moderno. Siguiendo la sugerencia de Ramito, Tuto deja de usar el cuatro de cuatro cuerdas y domina el de diez cuerdas.

Junto a Tuto Feliciano Ramito se presenta con mucho éxito en Fiesta en el Batey, un programa radial muy popular, cuya sintonía se escuchaba por toda la zona oeste de Puerto Rico desde Moca, Arecibo, Aguadilla, Isabela, Rincón, San Germán y Yauco.

Ramito apareció cantando en el film de la DIVEDCO durante la década de 1950

 

De la misma manera, Fiesta en el Batey atraía trovadores y cuatristas muy importantes de la zona como Germán Rosario (el Jíbaro de Yumac), José Angel Ortiz (el Jíbaro de Yauco), Luz Celenia Tirado (la Jíbara de las Lomas), Goyo Salas (cuatrista de Ponce), el Conjunto Conuco de Isabela, Gabino Vélez (trovador) y Pancho Ortiz Piñeiro cuatrista de Ciales.

En Nueva York, la casa Ansonia lanza el primer disco de larga duración de Ramito en 1951. Este disco de 10 pulgadas contiene ocho éxitos, incluyendo el seis mapeyé, El Toro Barcino; una décima que relata la experiencia trágica del campesino agricultor de la época:

El Toro Barcino

Ya murió el toro Barcino
El más bravo del corral
Después de tanto gramar
Y celoso en el camino
Se secó el palo de chino
Donde yo le amarraba
El toro que más fajaba
El que me dió las ganancia’
Y ahora se dice en mi estancia
Ya murió el buey que pitaba

Nunca, nunca había bajado
Al sitio donde cayó
Pero aquel día el bajó
Envuelto con el ganado
Estaba muy demacrado
De mi mente no se borra
Y hoy el loro y la cotorra
Dicen con gran desatino
Murió el torito Barcino
Que abanaba la zorra

Yo en mi caballo repinto
Yo le miraba sin dején
Porque tiraba muy bien
Junto con el toro pinto
Ese toro era distinto
Cuando el arao’ tiraba
Y a mi torito le gustaba
Siempre la yerba madura
Para hacer la pena dura
Murió quien lo pastoreaba

Ya acabaron mis ganacias
Pero quedó esta canción
Murió el toro y el peón
Que triste quedó la estancia
Ya se acabó la abundancia
Y este dolor me acrisola
Ya se secó la amapola
Ya murió el buey que pitaba
Murió quien lo pastoreaba
Y quedó la estancia sola

En 1952 en honor a Chuito el de Cayey (amigo cercano de Ramito), Ramito nombra su agrupación Rosas del Plata, nombre del conjunto de Chuito el de Cayey. Con este grupo que incluía al cuatrista Tuto Feliciano Ramito graba los temas El Jíbaro Turista (la primera controversia con su hermano Moralito) y al dorso la plena Futuros Campeones (Ansonia 5242).

También en 1952 Ramito plasma sus primeras grabaciones junto a Nieves Quintero en el sello Ansonia en Nueva York. Entre las primeras grabaciones junto a Nieves se encuentran los temas Nuestra Sangre (Seis Fajardeño de Plácido Figueroa) y La Cruz de tu Dolor. Nieves nos relata que para ese tiempo el era el cuatrista del Conjunto de Claudio Ferrer y las sesiones eran de “rompecabezas” ya que se ensayaban los temas en el mismo estudio de grabación y se grababan multiples artistas el mismo día.

Un detalle importante que nos agrega Nieves Quintero es que:

En Nueva York se hacían 4 a 5 shows teatrales cada semana en los teatros hispanos. Aquí se ganaba bien…mejor que grabando aveces. Y mucha gente llegaba a los shows. En las navidades era major todavía porqué los shows eran baile-shows… se presentaban los artistas primero y después arrancaban a bailar luego de las presentaciones. Y también había mucho ambiente y muchos teatros como El Palladium en la 53 y Broadway, el Manhattan Center en la 34, el Teatro Puerto Rico entre la 138 y Brooke, el Teatro Hispano entre la 116 y la Quinta avenida, el Teatro TriBoro entre la 125 y la Lexington, el Teatro San Juan entre la 165 y la Broadway, y el Club Caborrojeno entre la 140 y la Broadway…

En 1953 Ramito graba el primer bolero jíbaro de nuestro cancionero Boricua junto al Conjunto Típico Ladí: Una Mujer En Mi Vida. Según Luis Morales Ramito dedicó este tema a Lydia Merced Reyes, su segunda esposa quien se divorció de Ramito y a quien Ramito nunca dejó de amar.

Una Mujer En Mi Vida

Una mujer en mi vida
Se ha empeñado en destruirme
Dios le dará su castigo
Por mala, antes de morirme

Responde con desamor
Cualquier favor que le haga
Oh, mujer sin corazón
Que bien con el mal se paga

De noche casi no duermo
Pensando cual es la causa
Como no encuentro ninguna
Solo pienso en la venganza

Otro punto importante en la trayectoria de Ramito ocurre en 1953 cuando crea el ritmo de Seis Llanera junto a Tuto Feliciano. Los primeras temas grabados al ritmo de la llanera son Quererte Como Te Quiero y Mensaje de Amor (Ansonia 5804).

Entre 1954 y 1958 la música campesina pasa por una etapa de creatividad lírica y sonora donde sobresale Ramito como el líder de esta importante evolución. Junto a sus hermanos Moralito y Luisito, Ramito desempeña una era sin precedente de creatividad y de cambio social en la música típica. Durante estos años los hermanos Morales Ramos no solamente llevan la música Puertorriqueña a distintos países como Cuba, República Dominicana, México, entre otros, sino desarrollan y graban nuevos ritmos y melodías que modernizan el sonido del canto jíbaro.

Entre los ritmos que desarrollan los hermanos Morales encontramos los de Ramito: varios estilos del Aguinaldo Cagueño, la Enramada, el Seis Mapeyé, Seis Bolero, Cante Hondo de Vieques, Seis Tango, Seis Español, Seis Sucu-Sucu; los de Luisito: el "Quinto al Aire" (Aguinaldo Lamento), Seis Joropo, Seis Chacarera (tono menor), La Seguidilla, Seis Gaucho, Seis Sentimental y el Aguinaldo Clásico, entre otros, y los de Moralito: Seis Chacarera (tono mayor) y el Seis Bossa Nova.

Más que otro trovador de su época, Ramito fomentó, promovió y difundió la plena Puertorriqueña por todas partes del mundo. Por cierto, Florencio fue uno de los más importantes representantes y defensores de lo que hoy se llamamos la plena jíbara. Según Ramón López,

Muchas personas no saben que después de Canario, nadie ha grabado más plenas que Flor Morales Ramos. Ramito recogió la memoria jíbara en los años 50 y la proyectó con la excelencia de la voz más distinguida de la música campesina. Fue un prolífico compositor de todos los estilos de la música rural pero siempre acompañó su oferta musical con plenas y creó la más conocida de todas con la excepción de Cortaron a Elena: la inmortal Qué bonita bandera, plena obligada de todos los pleneros subsiguientes.14

Durante la década de 1950, Ramito – su pava, su machete, su vestimenta de cortador de caña, su gallo, sus plenas jíbaras, su voz emotiva y sus décimas – se convierte en la más fiel representación del lamento y nostalgia Boricua en Nueva York y de esa manera en un símbolo del sentimiento colectivo Puertorriqueño. Es decir, en Ramito renacen las memorias de tradiciones pasadas, de mejores tiempos (nostalgias) y crean en él y la música típica un símbolo de identidad importante en las poblaciones Boricuas inmigrantes que se desplazaban entre edificios extraños, areas urbanas marginales, residenciales públicos y vecindarios relegados a la pobreza.

 

 Ramito en Nueva York, en el 1962, durante un programa en la estación radial WHOM.
De izquierda a la derecha: Yomo Toro, guitarra, Florencio Morales Ramos "Ramito," ramo de guineos,
Pedro Rivera, güiro, Tuto Feliciano, cuatro.

 

De 1960 Hasta La Gloria

En 1960 Ramito se muda a Nueva York donde permance hasta 1972. De inmediato Ramito levanta el programa radial La Montaña Canta en la emisora WHOM. Junto a los cuatristas Yomo Toro, Tuto Feliciano y al guitarrista Cheo Rivera, la voz de Ramito llega a todos los hogares Boricuas de Nueva York por más de seis años.

Tras la década de 1960 Ramito graba en varios sellos disqueros como Ansonia, CanoMar, La Flor, Ricky, Artillería, BMC, Néliz, ElDorado, Nydia, entre otros. Pero plasma la gran parte de sus grabaciones en el sello Ansonia, donde permanence como artista exclusivo de 1949 hasta su muerte.

 


Ramito durante la década de 1970

 

En 1970 la Oficina del Gobierno de Puerto Rico en Nueva York emplea a Ramito como agente recreativo, llevando sus décimas a los trabajadores agrícolas migrantes en los Estados Unidos, hasta su regreso a Puerto Rico en 1972.

Desde Puerto Rico Ramito sigue llevando la décima campesina a lugares remotos del mundo como Japón, Hawaii, España, entre otros países. En una de sus giras conoce a su última esposa Irma Rodríguez, la Jíbara de Salinas, con quien contrae matrimonio.

La década de 1980 prueba fructífera, ya que Ramito sigue grabando para el sello Ansonia y continúa sus presentaciones en Estados Unidos y Puerto Rico. Es importante mencionar que en la gran parte de las grabaciones de esta época Ramito graba junto a trovadores invitados como Luis Miranda (el Pico de Oro), Vitín Morales (su hijo), Irma Rodríguez. También graba dos discos de larga duración con sus hermanos Moralito y Luisito, los cuales tuvieron buena aceptación comercial.

No obstante, la salud de Ramito empeora y le prognostican cancer. Su estrella se apaga un martes, día 23 de enero de 1990 en el barrio La Plena de Salinas, Puerto Rico. Ramito, quien padecía de cancer, se suicida de un balazo en el oído izquierdo en el hogar del padre de su esposa, Irma Rodriguez, La Jibara de Salinas.

 

En Resumen

Por más de 50 años Ramito deleitó al mundo con su voz y sirvió como maestro para todos los cantantes y trovadores de la música Puertorriqueña. En cuanto a su voz, el siempre recordado Dr. Francisco López Cruz dijo que "el sentimiento que Ramito le imprime a su décima y los matices de su voz son la clave de esta predilección y del impacto en la conciencia musical de los boricuas." Sin lugar a dudas, su voz, sus décimas y su vestimenta crearon una imagen que hasta hoy se reconoce como uno de los símbolos más representativos del Puertorriqueño.

 


Ramito durante la década de 1980

 

Nota del autor: Fue Ramito el autor de sus décimas?

Muchos de los admiradores de Ramito piensan (o como yo pensaron por mucho tiempo) que Ramito escribió todas sus décimas. El mismo Ramito reclamaba que había escrito el 95% de sus décimas, dato que hasta hoy está en duda.

Como autor inquieto que soy, me dispuse a resolver este misterio y me atreví hacerle las siguientes preguntas a todos los que llegué a entrevistar para este escrito: Fue Ramito el autor de todas sus décimas? Y Quien le escribía décimas a Ramito?

Las respuestas fueron reveladoras. Logré resolver el misterio, ya que casi todos los entrevistados compartieron muchos detalles importantes, con respecto a estas preguntas. Además, existen bastante pistas reveladoras en sus grabaciones y libros de décimas de distintos autores de la época donde se encuentran décimas grabadas por Ramito.

Por cierto, Ramito tuvo acceso a una gran variedad de escritores y trovadores que le escribían décimas a Ramito y que se estimulaban y enorgullecían al escuchar sus décimas por la radio en la voz del cantante más popular de décimas en la historia de Puerto Rico; autores y trovadores que hasta hoy permanecieron anónimos ya que Ramito registraba todas sus grabaciones bajo su nombre – Flor Morales Ramos.

Entre los grandes escritores y trovadores que ayudaron a levantar en alto al gran Ramito encontramos a los siguientes baluartes: Angel Pacheco Alvarado, Perfecto Alvarez, Guillermo Estrada, Iluminado Félix, Plácido Figueroa, Manolo Mata, Luis Morales (Luisito), Juan Morales (Moralito), Juan Navarro, Francisco “Paco” Roque, Victor Lluveras Ríos, Juan Pablo Rosario, Juan Serrano “Leña Verde”, Vicente Vázquez (el Ruiseñor del Turabo), Justino Vega, entre otros.

 

Notas alcalce:


1. Richard Blondet. “Nuestra música como bandera nacional” miércoles, 28 de diciembre de 2005 (Primera hora.com)
2. Orlando Santiago-Díaz, Historia y Manifestaciones de la Décima en Puerto Rico (Siglo XX). Ediciones El Cortijo. 2006.
3. Jesús Vera Irizarry, "Ramito" era el cantor de la música navideña en Puerto Rico. Associated Press, 1997
4. López, Ramón. Breve y Ajorada Historia de la Plena Enrojecida. http://caribejazz.com/ARTICULOS/Entries/2007/6/20_Breve_y_ajorada_histor...
5. Martínez, Ewin. Thesis: Popular Music and Cultural Identity: Record Producers in the Puerto Rican Migrant Community of E. Harlem / El Barrio from 1927 to 1950. City University of NY. May 2002.
6. Richard K. Spottswood. Ethnic Music on Records, Vol. 4. University of Illinois Press. 1990
7. Pedro Malavet Vega. “Navidad Que Vuelve” página 158. Editora Corripio. Ponce, Puerto Rico 1987
8. Revista “Primera Hora” Lunes 12 de diciembre de 2005. Año 1. No. 2


Entrevistados:

1. Nieves Quintero
2. Luis Miranda, el Pico de Oro
3. Luis Morales Ramos, el Montañero de Bairoa
4. Joaquín Mouliert, el Pitirre de Fajardo
5. Irma Rodríguez, la Jíbara de Salinas
6. Juan Pablo Rosario, el Pápa de los Trovadores
7. Luz Celenia Tirado, La Jíbara de las Lomas