| El   Trasfondo Musical...Para   la década del 1910 Puerto Rico no contaba con emisoras radiales y con   ningún     medio de comunicación que le hiciera promoción a la música   típica o la décima     puertorriqueña. Sin embargo, ya había empresas   disqueras norteamericanas que grababan en     San Juan a intérpretes   puertorriqueños, que sin ser trovadores grabaron piezas de     música   típica. A pesar de representar sólo una pequeña parte del repertorio   disquero,     lo que hoy llamamos música típica (seis, aguinaldo,   décimas) era muy popular entonces.     Podemos ofrecer como ejemplo de   estas compañías a la Edison y a la Columbia, las que     para la fecha   habían grabado a Gracia López, a Jorge Santoni, a Manuel Tizol y a la       Orquesta Cocolía.
 Para el 1914-1915, el antropólogo J. Alden Mason visitó a   Pueto Rico y registró más de     100 grabaciones de valor histórico.   Estas grabaciones incluían aguinaldos, décimas,     seises, bombas y   otros géneros puertorriqueños. Entre 1916 y 1921 encontramos más       compañías disqueras grabando o en búsqueda de talento en Puerto Rico. En   el 1916, la     compañía Victor grabó más de 20 piezas del Quinteto   Borinquen entre las que se     incluían algunos números con sabor   típico.  Aunque   gran parte de la actividad disquera tenía lugar en San Juan, al sur de   la     Isla, Ponce era vital centro de comercio y plaza de tradición y   actividad musical. La     cuna del tenor de fama mundial Antonio  Paoli,  era todavía durante las primeras décadas     del Siglo 20 una  ciudad de  gran actividad artística y cultural como lo atestigua la       concurrencia de importantes autores e intérpretes residentes en la   ciudad como Julio     Alvarado, la Banda de Bomberos de Ponce, la   familia Tizol, Ángel Pacheco Alvarado (el     Jíbaro de Peñuelas) y   otros. Además en el Ponce de la época se desarrollaba un nuevo       sonido llamado plena que se tocaba en el barrio la Joya del Castillo y   en San Antón 3 (Hasta donde sabemos no existen   grabaciones de la plena de     la época). 
 Sus Primeros Pasos hacia la Fama...
 Es precisamente a   principios del 1930 que encontramos a Chuíto en Ponce, cuando éste       contaba cerca de veinte años de edad. El joven artista vivía en el  Cerro  San Tomás, en     el barrio Tumba La Vieja, de donde se mudó a la  calle  del Agua en Ponce 4.      Pudo haber sido aquí donde Chuíto adquirió su      oído   musical y gran parte de su material decimista. Hemos de recordar que en        Ponce vivían dos grandes maestros del arte de versificar en   décimas: Don      Ángel Pacheco Alvarado 5       de Peñuelas y Don Arturo Silvagnoli.
 Fue en este   ambiente que Chuíto se inició en el cantar de décimas y música popular       junto al "Ciego Luna"- Gabriel Luna de Ponce 6.       De acuerdo a nuestras fuentes, Gabriel Luna tocaba primera       guitarra y Chuíto cantaba. Es posible que haya sido con Gabriel   Luna con quien Chuíto     aprendió a tocar la guitarra. Sabemos que desde el siglo XIX en Ponce se realizaban   concursos de trovadores. Sabemos     también que para 1932, Chuíto había   logrado sobresalir en unos de estos concursos.     Según información   ofrecida por Ramito durante una entrevista, "para 1932...se hizo     un   concurso de trovadores en Caguas. Después me contrataron Don Juan  Brugal  y Don Pepe     Belardo, que eran los dueños de los rones Brugal,   Caballito y Trafic. Allí empezó     también Chuíto el de Cayey".7  En el transcurso   del 1932, Chuíto viajó a Cayey gracias a unos músicos de este pueblo       de montaña. Valentín Medina y Vicente Ortega "Bejuco" formaban un dúo   en     Cayey desde donde viajaba por la Isla buscando sueldo y fama.   Valentín Medina era oriundo     de Ponce, tabaquero de profesión y   tocaba la guitarra. Los integrantes del dúo     conocieron a Chuíto en   uno de sus viajes a Ponce. Como no contaban con música típica en     su   repertorio, decidieron invitar a Chuíto a cantar con ellos en Cayey. En Cayey, Chuíto logró fama local por su talento en la   improvisación de décimas, su     talante jocoso y sus dotes de animador.   En Cayey, Chuíto se unió a Herminia Hernández -     Doña Millín, con   quien convivió por poco tiempo en la calle Eugenio Sánchez, en Pueblo       Nuevo. Según Rafael Torres, Chuíto tenía entonces de 24 a 25 años.   Torres era a la     sazón un muchacho de 14 años de edad y amenizaba los   mismos cafetines donde se     presentaba Chuíto, como el cafetín "Los   Turpiales." 8 Rafita recuerda   que Chuíto introdujo mucha música innovadora a Cayey. Con el dúo de       Medina y Ortega, Chuíto formó un grupo musical llamado Conjunto Rosas   del Plata 9.       El conjunto estaba compuesto por Chuíto el de Cayey       (voz), Valentín Medina -(guitarra), Vicente Ortega (voz), Pellín Aponte,   Domingo     Sánchez (cuatro) y Luis González (marímbola). Rafael  Torres  se unió a ellos más     tarde. Rafael Torres recuerda que fue con este grupo que Chuíto   debutó en el 1933 en el Teatro     Angélica de Cayey, donde estrenaron   el tema del conjunto A Cayey Me Voy escrita     por Jesús Ríos   Robles (Chuíto):  A las orillas del Platadonde viví mis días primeros
 a las márgenes del río
 del pueblo tabacalero
 a las sombras del Torito
 donde cantan los jilgueros
 me voy a ese pueblecito
 donde está el ser que yo más quiero.
 Me voy alegre contento a cantar mi serenata.
 Estamos cerca del Plata
 qué alegres los campamentos.
 Ya me voy, me voy, me voy, me voy
 si Dios no me mata.
 Me voy a Cayey a gozar
 con los Rosas del Plata.
 
 
  Oigan   a Rafita y sus amigos cantar A     Cayey me Voy con Ramón Vázquez en cuatro, Polo Ocasio en guitarra, grabado por el Proyecto del Cuatro en la marquesina de Polo Ocasio. (2006) 
 Mientras la fama   de Chuíto crecía en Cayey, en San Juan se establecía otro baluarte,      Ladislao Martínez (Maestro Ladí) y su     Grupo Aurora. El Grupo Aurora   contaba con Ernesto Mantilla (Ernestico), Claudio Ferrer,     Felipe   Goyco (Don Felo), Patricio Rijos (Toribio), Juan Cotto y Ramón Dávila   (Moncho).     Este grupo se presentaba por la emisora radial WKAQ en San   Juan  10.        El Grupo Aurora era muy popular; los programas       radiales que amenizaban llegaban a muchas partes de la isla incluyendo a   Cayey.
 Como otros pueblos dependientes de monocultivos en Borinquen   (café, tabaco, caña), Cayey     sufría de una grave situación  económica  tras la caída de la Bolsa de Valores en Nueva     York en  1929 y el  paso del huracán San Ciprián en 1932. Para esta época, el  gobierno de      Puerto Rico estableció campamentos de trabajo en Cayey  como parte de  los programas de     recuperación económica al amparo de  las políticas  del Nuevo Trato del Presidente     Roosevelt. Estos  campamentos tenían  como propósito revitalizar la economía local      proveyendo trabajo y  alimentación a los trabajadores locales. Chuíto  estuvo contratado      por $21.00 al mes para ofrecer entretenimiento a  los trabajadores del  campamento Mariano     Abril 11      que sostenía cerca de cien hombres que dormían en literas       colocadas en filas y se levantaban al amanecer para iniciar una   larga jornada en la finca.     Chuíto cantaba las "dianas" a las 5:00 de   la mañana y entretenía a los     trabajadores con danzas y boleros   durante el desayuno. A las 11:00 a.m. les cantaba     durante el   almuerzo y a las 6:00 p.m. cerraba el día con música alegre.  Fue para esta fecha que Chuíto se unió a Doña Julia León de   Cayey, con quien adoptó     una hijastra, Elsie Sonia León. Pepito, el   hermano de Doña Julia, tenía cerca de 15     años y Chuíto cerca de 24   años. La siguiente es una foto de Chuíto durante esta     época. 
 Esta foto fue  tomada en la casa  de Don Jesús Collazo     en el barrio Polvorín de  Cayey. Al fondo se  observan las torres de Cayey. En la foto se      encuentran, de derecha a  izquierda: Chuíto, Rafael Torres "Rafita"  (voz),     Vicente Ortega  (voz y maracas), Domingo Sánchez (cuatro),  Gaspar León (guitarra y voz),      y, de rodillas, Lucas Vázquez  (guitarra).   Foto colección Rafael  Torres.  	
 Hacia San Juan y sus primeros discos...
 En San Juan, la emisora radial   WKAQ era ya un poderoso medio de comunicación e     información. Sus   programas formaban parte de la vida cotidiana de muchos. A la altura del       1935 se escuchaba el programa Los Jíbaros de la Radio,   originalmente intitulado Compay     Sico y Compay Tello, el que se   transmitía a través de toda la Isla 12.  Aunque se trataba de un   programa de sátira política, la música estaba     a cargo del Grupo   Aurora, promotor de la música típica.
 Es a esta emisora a donde Chuíto acude de vez en cuando a   cantar. Se dice que Chuíto     conoció al grupo del Maestro Ladí por   mediación de Claudio Ferrer. No hemos podido     precisar cómo fue que   se allegó a esta agrupación, pero sabemos que Chuíto regresó a     Cayey   con canciones nuevas y letras de un tal Don Felo. Chuíto contaba a sus   amigos en     Cayey que tenía buenas relaciones con músicos de San  Juan  con los que intercambiaba     canciones. Rafael Torres recuerda  que  Chuíto cantaba canciones de Don Felo, del Trío     Matamoros, de  Rafael  Hernández, de Pedro Flores y del Cuarteto Machín, y que estos  temas      de moda agradaban mucho al público.  Chuíto alrededor de 25 años  	de edad. Foto colección   Alcaldía de Cayey   Cortesía Ramón Vázquez
 En  busca de mejores oportunidades, Chuíto el de Cayey  se mudó a Ponce en el  1936. Según     Arturo Silvagnoli, Chuíto es el  creador del seis con  décimas 13. Y lo hace al combinar el   ritmo de dos tangos: La cama vacía      con El tango errante, ambos de   Gregorio Ayala     14. Gregorio Ayala tenía un   programa radial en la emisora WPRP de Ponce que     se llamaba   Variedades Musicales y era auspiciado por la compañía de pastillas       Oscar-Gómez-Plata. Chuíto estuvo asociado con la WPRP desde su   inauguración en 1936     para la que estuvo presente. Chuíto y Gregorio   Ayala pasaban juntos en la emisora     animando distintos programas.  A pesar de la aceptación de la música típica, los nuevos   géneros populares dominaban     el ambiente musical en Puerto Rico.   Grupos musicales y orquestas como el Cuarteto     Victoria, el Grupo   Marcano, Johnny Rodríguez y su Conjunto y el Trío Matamoros reinaban       en las ondas radiales. A tono con esta realidad, Chuíto no limitaba su   repertorio a la     música típica e incluía las guarachas y las rumbas   tan apetecibles al gusto popular de     la época.  En Ponce, Chuíto también trabajaba en las promociones para   el Ron Kofresí junto a un     tal Jiménez Aguayo. Más tarde se convirtió   en propagandista oficial del ron. Bajo el     auspicio del Ron  Kofresí,  Chuíto formó el Trío Kofresí, que estuvo compuesto por      Chiquitín  García, residente del barrio Machuelito de Ponce, (voz y  maracas),  Juanchín     Santana (primera guitarra) y Chuíto (voz y  segunda  guitarra). El trío hizo     presentaciones por toda la Isla   promocionando el Ron Kofresí y cantando música popular     de buena   calidad. "El trío se disolvió cuando Chuíto se trasladó a la ciudad de       Nueva York. Entonces, Chiquitín García, quien no llegó a grabar con   el trío, se     consagró con el Cuarteto Mayarí que se había organizado   en el 1938." 15                                             Chuíto de   Cayey con el Trío Kofresi: Juanchín     Santana, Chuquitín García y   Chuito
                  Aunque   no hemos podido encontrar evidencia que     compruebe que Chuíto estuvo   en Nueva York en el 1938, sabemos que se presentaba con el     Conjunto   Típico Ladí. Chuíto registró por lo menos dos canciones (Cerca de  Cayey y  Mi     mulata) con el Conjunto Típico Ladí. En estas  grabaciones, la  voz de Chuíto tiene un     timbre joven, un registro  agudo y una voz muy  distinta a la de sus grabaciones de 1947-48.      Una dato encontrado  señala hacia la posibilidad de que estas  grabaciones hayan sido      realizadas antes del 1937: la canción Cerca  de Cayey, incluye a Claudio  Ferrer, quien se     había marchado a Nueva  York para el 1935-36.
 
  Chuito el de Cayey con el grupo   Industrias Nativas en Cataño, Fiesta de     guardias; Toribio, Don Felo,   Sarrail Archilla, Maestro Ladí, y Chuito el de  	Cayey  Foto colección   de Jaime     Jaramillo
 Para esta   fecha Chuíto ya era     conocido por el título de "el de Cayey," como se   le conocía en los programas     radiales de la WINL. Se dice que fue  el  famoso locutor Antonio Alfonso de WKAQ, quien le     había bautizado   como Chuíto el de Cayey 16 .      Muchos de los entrevistados también recuerdan que       Chuíto era conocido popularmente por la manera en que se presentaba por   la radio     diciendo, "Con tanto gusto", frase que pegó con el  público. El dilema de si Chuíto estuvo o no en Nueva York para la   época prevalece. En el 1939 el     Grupo Marcano grabó dos de sus   canciones en Nueva York: Sigan los tiempos cambiando,     Partes 1 &   2, con el sello Decca, #21052. Las canciones se grabaron el día 14 de       septiembre del 1939 17. También en Nueva York, el día 7 de noviembre      del   1940, Pedro Marcano y su Grupo grabaron otra canción de Jesús Ríos        Robles,  Como Criamos, décima jocosa cantada por Claudio Ferrer y Lalo   "el      Cura" para el sello Columbia, #6061 18.      Chuíto pudo haber viajado hasta Nueva York como pudo       haber vendido las canciones a Pedro Marcano o a Claudio Ferrer. El periodo 1940-47, representa una etapa confusa en términos   de los datos biográficos de     Chuíto. Aunque la música típica no se   graba mucho para la época, se escuchaba con     mucha frecuencia en la   radio. En Puerto Rico programas como La Hora del Volante y Rey del       Batey, entre otros, auspiciados por compañías de cerveza y productos   múltiples,     servían de catapulta a nuestros jíbaros cantores. En los   1940 la radio se convirtió en     el medio preferido para presentar   nuevos trovadores: Germán Rosario, Priscila Flores, La     Calandria,   etc. Chuíto ya era un veterano de la radio y se consideraba como uno de   los     mejores cantantes de música típica e improvisadores de la   décima. La década se inicia con la Segunda Guerra Mundial y la   llegada de muchos emigrantes     boricuas a suelo nuyorquino. Los   jíbaros puertorriqueños en Nueva York mantuvieron vivo     el quehacer   musical de su patria. Entre los valientes defensores de la música típica   que     grabaron en Nueva York para ese tiempo, encontramos a Claudio   Ferrer, quien aunque no era     improvisador, interpretó múltiples   números jíbaros y hasta formaba conjuntos jíbaros     durante las   Navidades.  No es hasta el 1947 cuando encontramos la huella de Chuíto   en Santurce. Según Noemí     Rosas Robles, su sobrina, la siguiente foto   se tomó en Santurce. Aquí vemos a     Juaniquillo (Juan Inés Aponte)   junto a Chuíto. La foto se tomó en El Fanguito, donde     Chuíto vivía   con su esposa cerca de la parada 24.
       Chuíto el de   Cayey y Juan Inés Aponte,     "Juaniquillo"  Foto colección de Noemi   Rosas Robles
 Para el 1948,  la industria de  grabaciones de     música jíbara en Nueva York crecía   significativamente. La ciudad de los rascacielos se     llenó de   grabaciones de jíbaros como Chuíto el de Bayamón, Ernestina Reyes (La       Calandria), y Ramito (Flor Morales Ramos). Ramito ha dicho en   entrevista que fue gracias a     Chuíto el de Cayey que pudo llegar   hasta Nueva York para grabar con el sello Ansonia.  Oigan una rarísima grabación, Festival en Puerto Rico, en el sello Rival por Chuíto el de Cayey en 1948. 
 Para Chuíto el de Cayey, como para otros artistas jíbaros   que andaban en busca de     sueldo, los viajes de Puerto Rico a Nueva   York se convirtieron en rutina. Las     oportunidades para grabar en   Puerto Rico eran pocas, mientras que en Nueva York, abundaban     las   casas disqueras que promovían la música puertorriqueña: Verne, SMC   Pro-Arte, Coda,     RCA Victor, Seeco, Columbia, etc. Fue precisamente   para el sello Verne que en Octubre del     1948, grabó Chuíto cuatro   canciones junto al cuatrista Sarrail Archilla. Estas canciones     se   convirtieron en décimas fundamentales para los demás artistas jíbaros de   ese     entonces: 1. Amor de madre [seis] - Verne 0397, Lado A2. Consejo a los hombres [seis fajardeño] Verne 0397, Lado B
 3. Mil felicidades [aguinaldo cayeyano] Verne 0398, Lado A
 4. Madre mía [seis con décimas] Verne 0398, Lado B
 Parte de la letra del aguinaldo, Mil Felicidades:             Llegaron los días de la Navidad.
 Hay felicidad
 y tanta alegría
 en la Patria mía.
 Estas Navidades
 hay tantas bondades
 como se merecen
 mientras todos ofrecen
 mil felicidades.
             Para esta época, Chuíto también grabó una   décima-controversia [Súplica postrera]     junto a Natalia (Anatalia   Rivera) donde anunció sus últimos deseos. Al terminar la     canción,   Chuíto le dice a Natalia, "Me entierras en Jayuya."
  Chuíto grabó Súplica Postrera  con Natalia (Anatalia Rivera) con el sello Lina en 1946 
 Parte de la letra de la décima, Súplica Postrera:
 Cuando alguno a tu ventana
 se acerque a cantarte versos
 sobre tus cabellos tersos
 tendrás mi mano liviana.
 Recordaras las mañanas
 que alegre te despertaba
 cuando junto a ti te hablaba.
 Dirás a Claudio y a Toñito:
 Al fin ya murió Chuíto
 el que alegre me cantaba.
             Para fines de la década del 1940, Ramito iniciaba una   carrera brillante, mientras su     maestro, Chuíto el de Cayey, buscaba   ingresos como podía: vendiendo décimas, vendiendo     ron y haciendo   presentaciones radiales. A la fecha, ya Chuíto vivía en Nueva York con   su     compañera "Doña Susie." Lamentablemente, no hemos podido   encontrar copias de     las décimas que Chuíto escribía y vendía. Para   ese tiempo, muchos intérpretes de     música jíbara acostumbraban   comprar las creaciones de los escritores de décimas y     registrarlas   bajo su autoría.  |