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Los tiples de Puerto Rico

El primer instrumento jíbaro y la antigua voz alta de la orquesta jíbara


Prof. Orlando Laureano distinguido tiplista que ha elevado el pequeño instrumento desde sus rústicos orígenes a un alto nivel dentro de la música moderna. Tiple hecho por Aurelio Cruz Pagán de Morovis.

RESCATE DEL TIPLE: La controversia

El tiple hubiera desaparecido por completo durante la segunda mitad del siglo veinte, si no fuera por los esfuerzos de una vanguardia compuesto de distinguidos investigadores como Alexis Morales Cales, Vicente Valentín, José Reyes Zamora, Juan "Kacho" Montalvo, y Orlando Laureano, entre otros, quienes propulsaron vigorosamente el rescate del bello e importante instrumento.

Los distintos grupos que estan fomentando el rescate del instrumento no están de acuerdo de qué forma de afinación y encordaje es la mejor para su rescate. Algunos van con los relatos antiguos* que sugieren que el tiple se afinaba en forma discontinua o re-entrante (o sea que las cuerdas no estan puestas en orden correlativa a su altura), otros quieren reestablecerlo con la afinacion de la guitarra (en intervalos de cuartas con una tercera) y finalmente algunos instan afinarlo con la modalidad de cuatro (en intervalos de cuartas). El argumento se divide entre aquellos que creen que el tiple se debe rescatar en la forma más antigua (con afinación re-entrante) o en la configuración más acesible al músico contemporáneo (con la afinacion en intervalos de la guitarra o del cuatro).


Francisco del Valle Atiles, escribió en 1887 que “el tiple, guitarrillo de cinco cuerdas, ofrece la inexplicable particularidad de tener la prima y la quinta iguales.”

 

Los puertorriqueños están construyendo tiples de nuevo: los talleres populares de tiples

El tiple es el instrumento jíbaro más antiguo, llegando desde España y las Islas Canarias tan temprano como el siglo 16 y 17. Derivados de los antiguos guitarrillos españoles, el tiple era el preferido para el agricultor y viajero por su tamaño compacto y fabricación sencilla y económica.

Los tiples se usaban en muchas de las más antiguas y aisladas comunidades del centro de la Isla, frecuentemente para acompañar las observación de ritos religiosos como misas, bodas y entierros. Durante los siglos se han usado tiples con tres, cuatro, cinco y hasta seis cuerdas, y con diferentes afinaciones y encordaduras de acuerdo a sus tiempos y la costumbre de su región.

Aunque los tiples que perduran al día de hoy se aproximan en su forma a las cítolas antiguas, tanto como las cítolas del siglo 19, en realidad los tiples que se formaron en la Isla durante los siglos más tempranos de la colonia española probablemente tenían una forma aguitarrada. Algunos de los tiples puertorriqueños antiguos que se encuentran en museos tenían la forma de guitarra como también la forma de cítara con sus esquinas cuadradas. Así que las dos formas perduran al día de hoy.

Durante los fines del siglo 19 el tiple, tanto como el cuatro y la bordonúa se reunían en orquesta por los jíbaros para acompañar versiones campestres de música de salón de bailes europeos como el vals, el minué y la mazurca--música que los jíbaros oían cuando visitaban las ciudades para vender su producto.

 

 Vemos arriba un tiple puertorriqueño del siglo 19 en la Colección de Teodoro Vidal--el cual reside actualmente en el Museo Nacional de Historia Americana de Washington DC. Este ejemplar, y una guitarra jíbara en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York son dos instrumentos típicos puertorriqueños del siglo diecinueve que encontramos en los Estados Unidos en perfectas condiciones--protejidos del desprecio, el descuido y del comején puertorriqueño. Seguimos buscando.

¿Cómo suena el tiple puertorriqueño?

 Música sagrada del campo grabada por Juan "Kacho" Montalvo para su CD "Adoradores del Fuego"


La trovadora Maria Esther Acevedo nos encanta con su interpretación de un Aguinaldo, respaldado por un tiple doliente. El gran güirero Toribio resalta. Vieja grabación del Instituto de Cultura.


Ernestina Reyes, La Calandria canta
El Mesias con un tiple detrás


Otra pieza de la magnífica grabación de Kacho Montalvo de música auténtica del campo con un Aguinaldo Cagueño destacando un tiple.

 

 

 

 

 

 

 

                                                     

 ¡Encontramos un tiple puertorriqueño antiquísimo!

Hemos encontrado un tiple requinto perteneciendo a los descendientes de Celestino Santiago (Don Lute) de Coamo, su dueño original, posiblemente hecho entre 1910 y 1925. Estimamos las medidas como:

Lóbulo inferior, 7’’ de ancho:

Lóbulo superior......4.75’’

Cintura..................  3’’

Hondo.....................  2’’

Largo de caja...............16’’

Cuerdas......................  tres doble o sencillas.

Funcion....................... punteado, melodia

Ejecucion....................  pajuela

 

VEA OTRO ANTIGUO TIPLE REQUINTO AQUÍ

 

 

 

 

 

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 !Un ramillete de tiples!

Tiple de una cuerda

   El renombrado músico y folklorista Juan "Kacho" Montalvo rememora que su padre, músico de tiples, hablaba de tiples de una sola cuerda.

Tiple de tres cuerdas
"Tiple requinto"
"Tres"

   Otro tipo de tiple que menciona Montalvo es el requinto de tres cuerdas, también conocido con el nombre tres. Un tiple de tres cuerdas también existía en las Islas Canarias en el siglo 19. En Puerto Rico, el pequeño tres se tenía por desaparecido pero en el pueblo costero de Peñuelas aún quedan artesanos y ejecutantes que lo afinan en sol y lo usan para acompañar las parrandas navideñas. Montalvo aclara que aunque más pequeño, era afinado en los mismos intervalos del tres cubano, pero en otra tonalidad, hecho confirmado por el fenecido cuatrista Roque Navarro (Adjuntas, 1913-2002).

"Pues el requintito de tres cuerdas, que era mas o menos en tono así [toca tres notas sobre su cuatro]... suena como un tres... era un tres pero chiquitito. El tres ahora es más grande que una guitarra . Pero esa afinación es la que tiene el tiplecito ese, como un Do mayor. Tocaba en primo las canciones, los aguinaldos y los seises, porque no habían mas canciones, eran mas que... una cosa que le decían "una y una"* que era pa' cantar. Y aguinaldos, esos, jíbaros…. Eso le cantaban a los reyes, le cantaban a la virgen, al Cristo, y pagaban sus promesas".

*(El seis "una y una" se llamaba asi porque su melodía se basaba en solo dos acordes que se repitían "una y una" repetidamente.

Los tiples que Montalvo encontró tenían tres cuerdas sencillas, aunque uno de los dos tiples en la colección del Instituto Smithsoniano porta tres órdenes de cuerdas dobles, con seis tarugos para seis cuerdas. El investigador Alexis Morales Cales adelanta la tesis de que el requinto de Puerto Rico, al que describe como “instrumento pequeñito de tres cuerdas, en unos casos de cuatro”. Añade que se encuentra mayormente en las áreas costaneras del sur de Puerto Rico y que quedan algunos ejemplares antiguos en Villalba. Morales Cales nota que el requinto original se usaba mucho haciendo contrapuntos a la melodía y en algunos casos rasgueando acordes con las tres cuerdas.

Nos explicó el fenecido cuatrista y artesano Efraín Ronda (1898-1994) que el tiple requinto era el más pequeño de los tiples y sus tres cuerdas de tripa se templaban como la primera, segunda y tercera de la guitarra, en intervalos de 4-3.

Este instrumento era el más chiquito, que no tenía mas que tres cuerdas. ¡Era él que se quedaba con la sala! En los aguinaldos y eso, ¡usted lo oía de lejos! Oía eso, porque resulta que eso los templaban muy alto. Las tres cuerdas son de tripa, se usa como primera, segunda y tercera. Y se templa exactamente igual que la segunda, tercera y cuarta de la guitarra.

Se tañía con la punta de un cuerno, en movimiento “p’arriba y p’abajo”, según lo describió. Ronda describió un tres cuyas medidas eran: ancho de siete pulgadas en la parte inferior de la caja sonora y cinco pulgadas en la superior; el diapasón con ancho de dos pulgadas y largo de diecisiete pulgadas. El hueco de la caja alcanzaba un máximo de dos pulgadas. Ronda cuenta de sus primeras memorias del tiple.

"Yo era muchacho, y me recuerdo que pasaba la plaza de mercado de San Germán, con la muchacha que me cuidaba desde yo niño, y estaba el viejo Nicanor y su hijo Mencho vendiendo cuatros, tiples, treces, requintos, labrados quizás con un machete. Los vendía a quince y a veinte centavos. Un cuatro valía un peso. Si lo querías detallado, te cobraba dos pesos. Eso fue del 1912 en San Germán. Pero vine un día a Mayagüez y vi guindao en un seto de una tienda que había que vendía comestibles vi dos tiples: uno valía una peseta. El otro valía cincuenta centavos-- porque le pusieron unos botones de nácar en el brazo. Entonces yo le dije a mi viejo, "yo quiero comprar ese tiple." Entonces le dijo al hombre "sácalo pa' ca." Y el hombre me dijo, "es para ti?" "Sí." "Porque te voy a regalar un set de cuerdas para que cuando se te rompan se las pongas." ¡Y todo por cincuenta centavos!. Ese estaba hecho de un palo que se llama Guanábana. Livianitito! La tapa era de Yagrumo".

Es enteramente posible que los intervalos del encordaje del tiple requinto se derivan de la segundas y terceras órdenes del tiple español, o de la cuarta y quinta orden del timple Canario.

Tiple de cuatro cuerdas
"Tiple quinto"
¨Quinto"

 

El quinto o tiple de cuatro cuerdas se empleaba casi exclusivamente en acordes, particularmente para acompañar ritmos alegres como la plena y la guaracha. En el histórico barrio de Coto de Laurel de Ponce se usaba mucho este tipo de tiple y en Juana Díaz queda un viejo ejemplar.

En una entrevista del 1992, el tiplista Maximiliano Ramos Flores recuerda haber recibido su primer tiple en 1920, siendo aún adolescente. Ramos recuerda que era un instrumento de cuatro cuerdas y trastes de tripa y atestigua no haber visto tiples con otras encordaduras. Relata, no obstante, que en sus mejores tiempos de tiplista ya se usaban primas y segundas de acero, la tercera entorchada y la cuarta de cuero. Pero la cuarta casi no se usaba, excepto para sustituir al cuatro o para tocar acordes. Para puntearlo se le ponían sólo tres cuerdas. Según su relato, el tiple participaba en conjuntos con el cuatro y la guitarra. El tiple le hacía segunda al cuatro, tocándose “puntiaíto”. Usaba el término habanao, para describir una técnica de acompañar rasgueando suavemente con acordes.

La foto a la izquierda muestra un antiguo tiple de cuatro cuerdas en manos del afamado artesano Vicente Valentín. Es interesante notar que usualmente sólo se usaban las primeras tres (convirtiéndolo en un tiple requinto o tres) pero a veces la cuarta cuerda se le ponía para sustituír al cuatro. El cuatro de cuatro cuerdas, también se tocaba pulsando sólo las primeras tres cuerdas, con el cuarto pulsado solamente al aire. Este sistema "modal" de encordaje y ejecución es antiquísima, remontándose a la cítola española de siglo 13.

En cuanto a la relación entre requinto y quinto, Cales observa que en muchos países de América se usa dicha relación de esta forma: requinto es el instrumento más agudo, quinto es el que le sigue, en una escala media.

Tiple de cuatro cuerdas
y una cuerda corta

"Tiple con macho"
"Tiplón"
"Tiple Mayor"

    Juan "Kacho"Montalvo encontró dos tipos de tiples en el municipio de Peñuelas en el sudoeste de la Isla. El primer tiple que encontró Montalvo se le llamaba tiple con macho o tiplón. Cales nos dice que también se encontraban en Guayanilla. En todo caso, el instrumento aparece vigente en sólo una región limitada de la Isla. Tenía la singularidad de una clavija taladrado al borde del diapasón, quedando fuera de la misma. A la cuerda que corresponde a dicha clavija, una cuerda más corta que las otras y que sonaba al aire, le llamaban “pichón”, “macho” o “chillo, de acuerdo a costumbre de la región. Esta cuerda corta se usaba como un pedal rítmico, o sea, se tocaba al aire repetidamente, mientras que las otras cuerdas se pisaban en la forma usual.Pablo Torres Rivera (n. 1912), artesano de tiples en Adjuntas, pueblo de la Cordillera Central, además confirma que en el tiple con macho la cuerda atada a la clavija en el diapasón no se pisa, pues “se usa para añadir sonoridad al instrumento”.
     Aunque no se ha encontrado un lazo claro y directo, le evidencia sugiere que el tiple con macho pudo haber tenido influencia de los esclavos de descendencia africana que habitaban la costa. El peculiar detalle de la “cuerda corta” atada al diapasón del instrumento nos recuerda del mismo detalle encontrado en instrumentos de cuerda del África Occidental.

Tiple de cinco cuerdas
"Tiple doliente"

Tiple construído en forma antigua por William Cumpiano

 

 

Roque Navarro recuerda tanto al tiple de cinco cuerdas que muchos hoy llaman tiple doliente. Asegura se le llamaba indistintamente tiple o vihuela. Cuenta Navarro que esta “vihuela” era un tiple con los mismos contornos de la bordonúa, pero más pequeño que ésta y que doblaba en tamaño al “requintito”. Ambos tiples se usaban en conjunto y acompañados de un güiro: “El tiple requinto de tres cuerdas tocaba la melodía, fuera del seis o fuera del aguinaldo, que era lo que se tocaba antes. Entonces el tiple de cinco cuerdas lo acompañaba haciendo las bases de guitarra”.

El apelativo “doliente”, de acuerdo a Navarro, se aplicaba a todos los tiples cuando acompañaban una canción sentimental. En el baquiné, ritual fúnebre practicado en algunos campos de la Isla en ocasión de la muerte de un niño, se tocaba con esos instrumentos. Es posible entonces que el enlace popular del tiple de cinco cuerdas con el nombre "tiple doliente" como apelativo exclusivo puede que sea una costumbre contemporánea.

Tiple quinto

 Vea el tiple de cuatro cuerdas más arriba

Mandurria

Nombre dado [en algunas regiones] a tiples con órdenes de cuerdas dobles (Maria Teresa Cadilla, 1933)